jueves, 11 de julio de 2013

Mi segunda pala groenlandesa

Hace algún tiempo me entraron ganas de hacer una pala groenlandesa y como no encontraba la madera adecuada que parece ser la de cedro rojo -Thuja plicata- opté por hacérmela con la primera que encontrara aunque solo fuera por matar el gusanillo, así que compre un listón de pino flandes procurando que no tuviera nudos. Sin haber comenzado con este listón encontré cedro bosse en una carpintería cercana que no era el cedro que buscaba pero era cedro. Así que la primera pala me la hice con este último listón y es la que ya conocéis. El otro listón de pino estaba ahí, apoyado en un pilar y esperando su destino. He aprovechado estos días de canícula, que da miedo salir de la cueva del aire acondicionado y en varios ratillos me he fabricado la que os enseño abajo.

Como curiosidad os diré que el pino flandes se trabaja mejor y que para mi sorpresa el peso final es inferior a la de cedro bosse. El peso de la de cedro es de 1176 gramos y la de pino 1146 gramos, si bien es verdad que la de pino tiene un par de centímetros menos. Estéticamente las dos son bonitas y están por debajo del peso de la que usaba habitualmente.  Espero encontrar alguna vez Thuya plicata para hacerme una que pese entre 800 a 900 gramos. Mientras tanto me estoy interesando por un kayak tradicional groenlandés aunque esto ya es más complicado que lo de la pala. Jejeje.
















2 comentarios:

  1. Hola Patronio, una madera sencilla de adquirir y que puede bajar del kilo sería el pino común. La última mía está en 865 g, incluso con varios nudos. Esa quizá es la pega de esta madera, que hay que escoger los listones para evitar los nudos, si es que así lo exigimos. Pero como ya digo, hay herramientas de madera con nudos que aguantan más que su propietario.

    ResponderEliminar
  2. Gracias Jílar. No sabía esto que me cuentas. De todas formas, con estas dos ya tengo más que suficiente y la próxima sería ya con Thuya plicata para ir ya sobre seguro.

    ResponderEliminar

Gracias por dedicar algunos minutos a comentar las entradas, las fotos o vídeos.