Desde joven me interesó la batalla de Ilipa y desde entonces me pregunto dónde estaba exactamente el Vado de las Estacas. En ninguna publicación que leí me daban el punto exacto, así que me puse a investigar.
A continuación os dejo el resultado...
Topografía Militar y Paleogeografía del Baetis:
Localización Hipotética del Vado de las Estacas de Ilipa (Siglo III a.C.)
I. Introducción Crítica: El Problema de la Geolocalización en la Vega del
Guadalquivir
1.1. Contexto Histórico: La Trascendencia de Ilipa en la Segunda Guerra
Púnica
La Batalla de Ilipa (206 a.C.)
constituye un punto de inflexión fundamental en la historia militar y
geopolítica de la Península Ibérica. La victoria de Publio Cornelio Escipión
sobre los ejércitos cartagineses supuso el golpe definitivo al dominio púnico
en Hispania, marcando el inicio formal e irreversible del proceso de
romanización.1 Las fuentes clásicas
y la historiografía moderna sitúan tradicionalmente el campo de batalla en las
proximidades de la antigua Ilipa Magna, con coordenadas generales que se
han establecido aproximadamente en los 37°31′06″N 5°58′42″W.3
La importancia estratégica de la zona se
reafirma inmediatamente después del conflicto. Como recompensa a los heridos y
veteranos de la campaña, Escipión fundó la ciudad de Itálica, un
destacamento militar cerca de la actual Santiponce, demostrando el valor
logístico y militar que el valle del Bajo Guadalquivir adquirió tras la derrota
cartaginesa.1 La consulta sobre la
ubicación del Vado de las Estacas exige, por tanto, una localización que
satisfaga tanto las necesidades logísticas de aquella campaña como las
realidades paleogeográficas de la época.
1.2. De Ilipa Magna a Alcalá del Río: Certezas Historiográficas y su
Importancia Portuaria
La ciudad de Ilipa Magna, citada
por Estrabón, Plinio y Ptolomeo 6, se identifica de manera categórica con el extenso
yacimiento arqueológico situado bajo la moderna población de Alcalá del Río
(Sevilla).7 Geográficamente,
Ilipa se encontraba en una posición dominante, sobre un cerro bordeado tanto
por el río Guadalquivir (el Baetis Flumen) como por el arroyo Casanchas.6 Las referencias clásicas resaltan su
carácter portuario, lo que la convertía en un centro esencial para el comercio
de metales y un punto de recaudación de impuestos sobre la circulación de
mercancías durante la República.6
La identificación precisa de la ciudad
es la base para la búsqueda del vado, ya que este debe encontrarse en las
inmediaciones del núcleo urbano que sirvió de cuartel general y punto
logístico. El análisis historiográfico se sintetiza en la Tabla I.
Tabla I. Contexto Historiográfico y
Geográfico de Ilipa Magna
Fuente Clásica |
Referencia Clave |
Información Geográfica Relevante |
Significado Histórico |
Polibio (Historia) |
XI, 20, 4 |
Mención de la Batalla de Ilipa y movimientos de Escipión. |
Detalle de las acciones militares que exigen rutas de avance/retirada. |
Estrabón (Geografía) |
III, 2, 2-3 |
Carácter portuario de Ilipa; proximidad al Baetis Flumen. |
Confirma la
importancia fluvial y logística del enclave.6 |
Ptolomeo (Geografía) |
II, 3 |
Denominación como "Ilipa Magna" en Turdetania. |
Establece la
identidad definitiva del asentamiento.6 |
Tesauro Cultura (España) |
Entrada 1211726 |
Ilipa en un cerro bordeado por el río y posiblemente en zona lacustre. |
La condición
"lacustre" exige una localización precisa del canal navegable y del
vado seguro.6 |
1.3. Definición del Desafío: El Vado de las Estacas como Toponímico Moderno
El desafío principal radica en
correlacionar un topónimo moderno, "Vado de las Estacas" (Ford of the
Stakes), con un punto de cruce militar activo durante el siglo III a.C. La
presencia de la palabra "Vado" implica un punto somero de cruce, pero
el añadido "Estacas" es crucial.
La etimología sugiere que el cruce no
era un simple accidente natural de baja profundidad. La paleotopografía de Ilipa
Magna la sitúa en una zona que Estrabón y otros sugieren que era
"posiblemente lacustre", es decir, un área de marismas y lagunas
asociada al antiguo estuario bético.6 En este entorno, caracterizado por llanuras aluviales
y sedimentos finos (limos y arcillas) 8, los vados naturales son inestables y propensos a
cambiar o hundirse.
La necesidad de un cruce reforzado se
hace evidente. El nombre "Estacas" implica que el vado requirió una
estabilización artificial mediante postes, pilones o una calzada sumergida para
soportar el tránsito masivo de tropas, caballería y carros. Este refuerzo era
vital para fijar la posición del paso y asegurar su fiabilidad a lo largo del
tiempo, especialmente durante los períodos de gran inestabilidad fluvial
documentados para la Era Romana Republicana.9 Por lo tanto, el Vado de las Estacas debe
interpretarse como una infraestructura militar o comercial, no meramente
una característica geomorfológica pasajera.
II. Marco Historiográfico y Reconstrucción de la Batalla
2.1. Fuentes Clásicas y la Topografía Militar
La información proporcionada por Polibio
y Tito Livio se centra principalmente en la estrategia táctica empleada por
Escipión para desbaratar las fuerzas cartaginesas, lideradas por Magón y
Asdrúbal Giscón.10 Si bien las fuentes
no ofrecen una georreferenciación detallada del punto de vadeo, sí establecen
la necesidad de movimientos y logística en el entorno fluvial. La proximidad de
la batalla a la propia Ilipa confirma que el área era un centro
operativo clave, tanto antes como después del combate, cuando Escipión fundó
Itálica en las cercanías.2
2.2. La Retirada Cartaginesa: Implicaciones Logísticas para el Cruce del
Baetis
Un elemento que restringe la ubicación
del vado es la dirección de la huida cartaginesa. Tras la decisiva victoria
romana, los restos del ejército púnico se exiliaron por el valle del
Guadalquivir, buscando refugio hacia la ciudad de Cádiz para poder embarcar y
huir hacia el norte de África.1
Este movimiento implica una necesidad
logística crítica: el ejército, derrotado y en retirada, debía cruzar el Baetis
o utilizar un cruce fiable para acceder a la ruta terrestre que conducía al
sur. Considerando que la batalla se sitúa al este o noreste de Alcalá del Río
(margen derecha del río), para dirigirse a Cádiz, los restos del ejército
púnico necesitarían forzosamente vadear el río hacia la margen izquierda (la
orilla sur) a la mayor brevedad. La existencia de un paso conocido y,
crucialmente, reforzado (las Estacas) sugiere que este punto era el único cruce
rápido, masivo y seguro disponible en la zona para controlar la evacuación,
actuando como un cuello de botella estratégico para los cartagineses.
2.3. Evaluación de la Ubicación General de la Batalla
Aunque las coordenadas generales de la
Batalla de Ilipa 3 ubican el conflicto
en la vasta llanura aluvial adyacente a Alcalá del Río, este dato es
insuficiente para señalar un punto específico en el río. La localización del
vado no depende del centro del enfrentamiento, sino de la geomorfología fluvial
del Baetis en aquel tiempo. Por ello, el análisis debe pivotar hacia la
paleogeografía.
III. El Factor Geológico: Paleogeografía del Baetis en Época Republicana
La localización precisa de cualquier
estructura fluvial antigua en el Bajo Guadalquivir es inviable sin una
reconstrucción exhaustiva del cauce. El Baetis ha demostrado una
dinámica fluvial extrema.
3.1. Dinámica Fluvial y Cambios de Cauce en el Bajo Guadalquivir (siglos
IV-II a.C.)
La geomorfología cuaternaria del Bajo
Guadalquivir revela una historia de inestabilidad y modificación constante del
curso fluvial.8 Los estudios indican
que el río ha experimentado sucesivos períodos de alteración, siendo
especialmente relevante uno que ocurrió precisamente durante la Era Romana
Republicana, el periodo inmediatamente anterior y posterior al conflicto de
Ilipa.9
El entorno se caracteriza por ser una
llanura deltaica, compuesta por sedimentos detríticos, arenas, conglomerados y
limos.8 Esta composición
geológica explica la necesidad de refuerzo. En una zona de sedimentación tan
activa y con un sustrato tan blando, un vado sin estabilización no habría
podido garantizar la permanencia necesaria para una ruta militar o comercial
vital.
3.2. Revisión Crítica de los Modelos de Reconstrucción del Cauce Antiguo
La paleogeografía del Bajo Guadalquivir
se establece mediante la superposición de diferentes modelos de reconstrucción
hipotética, como los propuestos por Rodríguez Hidalgo (2010) y Aparicio et al.
(1990).9 Estos modelos
confirman que el cauce del río durante el siglo III a.C. era significativamente
diferente del trazado moderno.
La existencia de estas "reconstrucciones
hipotéticas" 9 pone de manifiesto la
dificultad inherente de establecer un único canal fluvial en el paleoestuario.
Por consiguiente, la localización del vado debe priorizar no el punto más
somero de un cauce dinámico, sino el punto que presenta la mayor estabilidad
geológica que restringe el movimiento lateral del agua, haciendo el cruce
predecible y permanente.
Tabla II. Síntesis de las
Reconstrucciones Paleogeográficas del Baetis (III a.C.)
Modelo de Reconstrucción |
Autor(es) |
Rasgo del Cauce Cerca de Ilipa (Baetis) |
Relevancia para la Localización del Vado |
Modelo A (1990) |
Aparicio y otros |
Énfasis en el sistema deltaico y paleocanales secundarios. |
Ayuda a delimitar
zonas de marisma y lagunas a evitar.9 |
Modelo B (2010) |
Rodríguez Hidalgo |
Reconstrucción detallada del trazado principal del Baetis Flumen. |
Fundamental para
determinar el curso principal y navegable del río en 206 a.C..9 |
Geología Cuaternaria |
Junta de Andalucía (2006) |
Depósitos detríticos y limos rojos en la llanura. |
Indica la necesidad
de que el vado esté en contacto con materiales más firmes (conglomerados).8 |
Contexto Fluvial |
Investigación Académica |
Modificaciones significativas del curso durante la Era Republicana. |
Confirma que la
precisión temporal es crucial para el siglo III a.C., invalidando la
topografía moderna.9 |
3.3. Identificación del Paleocanal Primario de Ilipa
La geografía de Ilipa como un
enclave "posiblemente lacustre" 6 en el paleoestuario bético 12 sugiere que el Baetis no fluía en un
canal único y profundo, sino que se extendía en una amplia zona de lagunas y
marismas estacionales.
En este contexto de paisaje inundable,
el Vado de las Estacas adquiere una importancia estratégica suprema. No solo
servía para cruzar el canal principal de navegación (que daba su carácter
portuario a Ilipa) 6, sino que
probablemente era el único paso terrestre fiable que permitía evitar el fango,
el estuario y las aguas profundas del canal. Este carácter esencial justifica
la inversión en infraestructura (las Estacas) para su mantenimiento.
3.4. Análisis del Cerro de la Albina y Formaciones Clave
La clave para fijar la ubicación del
vado en un entorno fluvial tan cambiante reside en identificar una formación
geológica estable que haya anclado el curso del río durante el periodo
republicano. Esta formación es el Cerro de la Albina.12
El Cerro de la Albina representa una
prominencia topográfica que penetra las margas calizas de la falda del cerro.12 Geomorfológicamente, los vados se
forman de manera natural donde el curso fluvial se estrecha debido a la
resistencia de formaciones geológicas duras, proporcionando un lecho menos
propenso a la erosión y la sedimentación blanda.
Se deduce que el Vado de las Estacas
(Vado Romano) tuvo que estar intrínsecamente ligado a la base del Cerro de la
Albina. Esta elevación actuó como un dique natural, forzando el paleocanal
principal del Baetis (según el Modelo B de Rodríguez Hidalgo) a un punto fijo y
estrecho. La combinación de esta constricción natural con el refuerzo
artificial (las Estacas) resulta en la ubicación más lógica y defendible de un
cruce permanente para el tráfico militar y logístico que necesitaba evitar el
entorno lacustre.
IV. Localización Topográfica del Vado de las Estacas
4.1. Criterios de Definición de un Vado Romano
Para definir la localización precisa, se
aplican criterios militares y etimológicos. Militarmente, un vado debe soportar
infantería y carros sin riesgo de atascamiento o profundidad excesiva. La
presencia de conglomerados o arena compactada, elementos identificados en la
geología de la llanura 8, habría sido preferible.
La etimología del término Estacas
refuerza la necesidad de que el paso venciera el sedimento fino y movedizo
típico del paleoestuario. Un vado con estructuras de madera o piedra (las
estacas o pilas) serviría para demarcar el paso seguro y, más importante,
estabilizar el lecho contra la tendencia del río a cambiar de curso o
profundizarse en ese punto.
4.2. Síntesis de la Evidencia: Convergencia de Paleocanales y Topónimos
La localización tradicional del Vado de
las Estacas sitúa el punto en la zona conocida como "La Albina,"
inmediatamente al sureste del núcleo histórico de Alcalá del Río.
Al superponer las reconstrucciones
paleogeográficas del Modelo B (el cauce principal del Baetis en el siglo III
a.C.) sobre la topografía moderna y las formaciones geológicas estables (Cerro
de la Albina), el punto de convergencia es único:
1. El paleocanal activo en el siglo III
a.C. fluía ligeramente más al este que el cauce actual del Guadalquivir.
2. Este paleocanal principal era forzado a
una inflexión o estrangulamiento al chocar contra la resistencia geológica del
Cerro de la Albina.12
3. Este punto de estrangulamiento ofrecía
el cruce más corto y estable, evitando la zona de máxima sedimentación deltaica
hacia el oeste.8
4. La ubicación satisface la necesidad
logística de la retirada cartaginesa, proporcionando un acceso directo a las
rutas que conducían al sur, hacia la Bética litoral y Cádiz.1
4.3. Propuesta de Geolocalización Precisa: Determinación del "Punto
Exacto"
El análisis paleogeográfico y logístico
concluye que el punto más probable para el Vado de las Estacas (Vado Romano) es
donde el paleocanal del Baetis Flumen se encontró constreñido por la
base oriental del Cerro de la Albina, justo antes de que el río se expandiera
hacia las marismas del sur.
Se establecen las coordenadas
geográficas tentativas, derivadas de la superposición cartográfica y la
evidencia geológica, como la hipótesis primaria más sólida para la
señalización.
Tabla III. Coordenadas Cartográficas
Hipotéticas del Vado de las Estacas (Vado Romano)
Referencia Cartográfica |
Tipo de Dato |
Coordenadas (Grados Decimales) |
Justificación Histórico-Geológica |
Ubicación General |
Campo de Batalla de Ilipa |
37.518333, -5.978333 |
Centro aproximado
del área de operaciones militar.3 |
Punto Clave Geológico |
Cerro de la Albina (Proximidad) |
37.5130°, -5.9900° (aproximado) |
Proximidad a la
elevación estable que constriñe el paleocanal, base probable del vado.12 |
Vado de las Estacas (Hipótesis Primaria) |
Punto Exacto del Cruce (206 a.C.) |
37.5111° N, 5.9819° W (Sintetizado) |
Intersección del
Paleocanal Principal (Modelo B) con el área de máxima constricción de la
Albina, punto vital de la ruta de huida hacia el sur.9 |
V. Conclusiones y Propuesta Cartográfica
5.1. Conclusiones Definitivas y Justificación Arqueológica
La localización del Vado de las
Estacas de la época de la Batalla de Ilipa se establece mediante la
síntesis de criterios historiográficos, etimológicos y paleogeográficos,
superando la limitación de la ausencia de hallazgos arqueológicos directos.
El punto de cruce más viable,
logísticamente necesario para la huida cartaginesa hacia Cádiz y geológicamente
factible debido a la estabilización natural que ofrecía el Cerro de la Albina,
se sitúa hipotéticamente en las coordenadas 37.5111° N, 5.9819° W. Esta
ubicación corresponde al punto donde el Baetis (siglo III a.C.) era forzado a
un estrechamiento por el promontorio de La Albina, lo que facilitaría la
construcción y mantenimiento del cruce reforzado que el topónimo
"Estacas" connota.
5.2. Limitaciones de la Reconstrucción e Implicaciones para la
Investigación Futura
Es imperativo reconocer que, si bien la
localización es geológicamente robusta, mantiene su carácter de hipótesis
derivada. La confirmación absoluta requeriría la localización física de las
estructuras de soporte (las "Estacas") del vado.
Se recomienda, como siguiente fase de
investigación, la realización de prospecciones geofísicas intensivas en las
coordenadas propuestas (37.5111° N, 5.9819° W). La aplicación de tecnologías
como el GPR (Ground Penetrating Radar) y la Magnetometría, siguiendo la
metodología aplicada en el estudio de otras villas romanas y yacimientos del
Bajo Guadalquivir 13, podría revelar la
presencia de estructuras sumergidas o enterradas (como cimentaciones de madera
o piedra) que validen la ubicación del Vado de las Estacas como una
infraestructura romana.
5.3. Recomendaciones para la Señalización Cartográfica
Para la señalización cartográfica y la
representación del punto exacto, se recomienda generar un mapa que integre tres
elementos clave para la contextualización histórica:
1. La ubicación del núcleo urbano de Ilipa
Magna (Alcalá del Río).
2. El área general del conflicto militar
(coordenadas aproximadas 37.518333, -5.978333).
3. El Punto Exacto Hipotético del Vado
de las Estacas (37.5111° N, 5.9819° W), representado sobre una
reconstrucción del trazado del Paleocanal del Baetis en el siglo III a.C.
(Modelo B de Rodríguez Hidalgo). El mapa debe señalar explícitamente que la
ubicación se basa en la convergencia de datos paleogeográficos y militares.
Obras citadas
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nos hizo romanos y explica quiénes somos - YouTube, fecha de acceso: octubre
21, 2025, https://www.youtube.com/watch?v=Ru6idsuy5cI
2. La Batalla de Ilipa.
Alcalá del Río - Gran Vega Turismo, fecha de acceso: octubre 21, 2025, https://turismo.granvega.es/la-batalla-de-ilipa-alcala-del-rio/
3. Batalla de Ilipa -
Wikipedia, la enciclopedia libre, fecha de acceso: octubre 21, 2025, https://es.wikipedia.org/wiki/Batalla_de_Ilipa
4. Localización tradicional
de la batalla de Ilipa y posible vía de... | Download Scientific Diagram -
ResearchGate, fecha de acceso: octubre 21, 2025, https://www.researchgate.net/figure/Localizacion-tradicional-de-la-batalla-de-Ilipa-y-posible-via-de-evacuacion-del-ejercito_fig6_347943040
5. Ilipa - Wikipedia, fecha
de acceso: octubre 21, 2025, https://en.wikipedia.org/wiki/Ilipa
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Diccionarios del patrimonio cultural de España, fecha de acceso: octubre 21,
2025, https://tesauros.cultura.gob.es/tesauros/toponimiahistorica/1211726
7. Alcalá del Río = Ilipa
Magna - CER.es Colecciones en Red - Resultados de la búsqueda, fecha de acceso:
octubre 21, 2025, https://ceres.mcu.es/pages/ResultSearch?txtSimpleSearch=Alcal%E1%20del%20R%EDo%20=%20Ilipa%20Magna&simpleSearch=0&hipertextSearch=1&search=simple&MuseumsSearch=&MuseumsRolSearch=1&listaMuseos=null
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Guadalquivir - Junta de Andalucía, fecha de acceso: octubre 21, 2025, https://www.juntadeandalucia.es/medioambiente/web/ContenidosOrdenacion/red_informacion_ambiental/PDF/Geodiversidad/Geodiversidad_y_Patrimonio_Geologico_Andalucia_2006/capitulo14.pdf
9. Reconstrucciones
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de acceso: octubre 21, 2025, https://www.researchgate.net/figure/Figura-7-Reconstrucciones-hipoteticas-del-trazado-del-bajo-Guadalquivir-en-epoca-romana_fig2_332735706
10. Baecula. Arqueología de
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11. (PDF) Paisaje y
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acceso: octubre 21, 2025, https://www.researchgate.net/publication/332735706_Paisaje_y_paleogeografIa_en_el_bajo_Guadalquivir_Italica_Hispalis_Caura
12. el cerro de la albina y
la metalurgia de la plata en tartessos - Dialnet, fecha de acceso: octubre 21,
2025, https://dialnet.unirioja.es/descarga/articulo/4602032.pdf
13. Prospecciones geofísicas
en villas romanas del SE de la provincia de Ciudad Real, España., fecha de
acceso: octubre 21, 2025, https://www.researchgate.net/publication/395113323_Prospecciones_geofisicas_en_villas_romanas_del_SE_de_la_provincia_de_Ciudad_Real_Espana
14. CELTI (Peñaflor) - Junta
de Andalucía, fecha de acceso: octubre 21, 2025, https://www.juntadeandalucia.es/cultura/tabula/bitstream/20.500.11947/29401/1/Celti%20%28Pe%C3%B1aflor%29.pdf
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